jueves, 26 de mayo de 2011

LA LEYENDA DEL JUDÍO

En lo que podría ser el acto de fe más sobresaliente, fue relajado al fuego don Tomás treviño y sobre monte, nacido en castillo la vieja. su madre, doña Leonor martines fue relajada en estatua por judaizante en la inquisición de vallado lid.

Se ignoro cuándo don Tomás, pasó a la Nueva España, pero continuó la tradición familiar impuesta por su madre y fue apresado por el santo oficio a finales del siglo XVII, pero fingió arrepentimiento fue reconciliada y puesto en libertad. Poco tiempo después se casó con maría Gómez procreando dos hijos llamados Rafael de sobre monte y Lonor martines, quienes fieles a la familia también collerón a las prisiones de la inquisición.

Pero ¿cuales fueron los crímenes cometidos por don Tomás Treviño?
He aquí una breve descripción de ellos.

cuando vivía en Guadalajara tuvo una tienda con dos accesos. Bajo una de las puertas había enterrado un cristo, y se cuenta que todos aquéllos que entraban por ahí, les vendía más barato que alos que entraban por la otra. comportaban también que en las noches azotaba a un niño dios de madera el cual el cual conservaba las marcas de los azotes y por esto se consideró como milagroso venderandose en la iglesia de santo domingo.

Cuando regresó a México fue nuevamente hecho prisionero por el santo oficio con la respectiva incautación de bienes, nuevamente fingió arrepentimiento y fue puesto en libertad.

en el nuevo proceso que se le siguió en donde fue condenado a la hoguera, los cargos fueron los siguientes:

realizar ceremonias judaicas, cubrirse la cabeza al momento de comer, iniciar la comida con un plato de buñuelos cubiertos con miel, degollar las gallinas con un cuchillo diciendo una oración con la vista hacia el oriente, se le acuso de obligar a su mujer y a su cuñada a denunciarse al santo tribunal por que ya estaban presos sus cuñados y su suegra, de haberse circuncidado, de no oír misa, cuando le decía buenos días o buenas tardes, él respondía beso las manos de vuestras mercedes, en lugar de alabado sea el santísimo sacramento,

La sentencia se cumplió el 15 de abril de 1649, Don Tomás treviñó de sobre monte con san benito y corza sin vela verde porque no la quiso, se le amordazó por blasfemó y fue entregado a la justicia y brazo seglar. Una vez en poder de la justicia fue montado en una mula, la cual reparaba cambiándosele a varias, la gente comentaba que los animales no quieren llevar en su lomo a tan perro judío. después de tantos intentos fue montado en un caballo que era conducido por un indio, el cual le aconsejaba se arrepintiera correspondiendo Don Tomás con golpes y patadas.

Ya en el quemadero ubicado entre el convento de San Diego y la alameda se le amarró al
agarrote de los suplicios y se encendió la hoguera. Don Tomás, a pesar del fuego y el humo no se quejó ni grito, al contrario, acercaba los brazos y recordando sus bienes confiscados exclamo:

-¡ECHEN MÁS LEÑA QUE MI DINERO ME CUESTA!


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